No es arte si no es potencialmente un desastre
Después de ofrecer las últimas sesiones en línea y en abierto, se presenta la residencia de Magda Puig en el INS Joan Fuster
Si el 5 de mayo anunciábamos la apertura al público del proceso de creación de No es arte si no es potencialmente un desastre en los canales del Teatre Lliure –en unas sesiones que podéis recuperar en la página web del teatro–, hoy es momento de informar de la presentación del resultado del proyecto, accesible a través del blog de Magda Puig EN RESiDÈNCiA en el Instituto Joan Fuster. Un proceso que ha contado con la participación de una quincena de alumnos y alumnas de 2º de ESO del centro y de dos docentes, y que estimuló a los jóvenes la reflexión en torno a la memoria colectiva o a la capacidad de la práctica artística para expresar pensamientos críticos o denunciar realidades injustas.
Publicación del resultado final
Desde la exposición interactiva que se ofreció en el Joan Fuster en diciembre a los trabajos realizados durante el confinamiento, la residencia de Magda Puig ha generado material abundante y muchas preguntas en torno a las prácticas artísticas. Las diferentes etapas del proceso de creación han dado pie a la edición de un fanzine introducido por el manifiesto que firman los y las jóvenes participantes. 'Nosotros somos un grupo que queremos cambiar los puntos de vista de la gente, que queremos cambiar las rutinas para hacer algo diferente. (...) Queremos ser gente que aprende de otra manera', dicen. La voz de estos alumnos se hace oír en cada página, en el collage de fotos de objetos de uso cotidiano que adoptan nuevas funciones o en los pedazos de papel donde destacan que, sobre todo, durante la residencia han tomado conciencia de la fuerza expresiva de la creación artística. El fanzine es un testimonio completo de sus investigaciones, pero también del proceso de descubrimiento del grupo sobre la verdadera dimensión del arte y la libertad que ofrecen los lenguajes artísticos. Porque, como leemos en la cita de Milo Rau reproducida al inicio de la revista, 'los límites los tienen que determinar solo los artistas con lo que quieran y puedan hacer'.
Más testimonios del proceso
En la web del Teatre Lliure, espacio que ha comisariado No es arte si no tiene la potencialidad de ser un desastre, podemos recuperar también las propuestas que Magda Puig fue compartiendo con los alumnos y alumnas las últimas semanas del proceso. Retos fotográficos, pequeñas intervenciones para alterar la cotidianidad doméstica o la realización de esculturas vivientes son algunos de los ejercicios que la artista propuso al grupo del Joan Fuster y que, ahora, pueden llevar a cabo todas las personas que lo deseen...