Marc Badia EN RESiDENCiA en el Instituto Doctor Puigvert

«Como regalo por el ritual de iniciación de sus 15 años, Camille 2 decidió pedir implantes de barba hechos con antenas de mariposa; una especie de barba tentacular que permitiría extender sus capacidades perceptivas humanas e incluir la sensibilidad gustativa vivida de los mundos de los insectos, (...)»

Las historias de Camille: los niños del compost, Donna Haraway

El proyecto quiere tomar como punto de partida la vida cotidiana del alumnado para trasladarla a una ficción especulativa materializada juntando las artes visuales y plásticas en un proceso de trabajo cooperativo. Formulando al alumnado la pregunta ¿Qué te preocupa? Buscaré generar alternativas recurriendo a la ficción especulativa. 

La vida cotidiana del alumnado y su diversidad es el primer centro de interés. ¿Cómo es su día a día? ¿Cuáles son sus rutinas? ¿Qué sienten? ¿Qué les preocupa? ¿Qué ven desde la ventana de su casa? ¿Qué ven en su móvil? ¿Qué música escuchan? ¿Cómo ven el mundo? Todo ello describe cómo viven y quiénes son, su identidad, pero también aporta una narrativa de la vida diferente a la institucional, a la de los medios y las redes sociales. Esta narrativa es relevante para su subjetividad, sólo desde ella puede articularse todo lo común. Esta subjetividad en relación con otras subjetividades del resto del alumnado, de los docentes y del entorno es susceptible de producir un proceso de aprendizaje para todos, un proceso dialéctico desde el cual construir nuevas realidades. La ficción especulativa es una herramienta que nos sirve para imaginar realidades alternativas. 

A través de ella podemos hacer el ejercicio de disuasión de la ficción de una sola narrativa del pasado, del presente y del futuro. Nos puede servir para imaginar de este modo posibles mundos alternativos en los que las problemáticas del presente se conviertan en ruinas sobre las que construir nuevas realidades.